Chocó (Subcuenca Atrato)

Chocó (Subcuenca Atrato)


INTRODUCCIÓN

Desde el punto de vista regional, la Cuenca Chocó, constituye una extensa depresión geomorfológica localizada entre la Cordillera Occidental y la Serranía de Baudó, que se extiende por el norte desde la frontera con Panamá, y por el sur hasta la Falla de Garrapatas, en la región de Buenaventura. El Cinturón Deformado de Istmina, que al mismo tiempo representa un alto del basamento, permite diferenciar entre una Subcuenca Atrato al norte, y una Subcuenca San Juan al sur (Figura 2).


GENERALIDADES

La Subcuenca Atrato constituye la parte septentrional de la Cuenca Chocó (sensu ANH, 2007) y está delimitada al Norte por la frontera internacional con la República de Panamá, al oriente por el piedemonte occidental de la Cordillera Occidental, al oeste por la Serranía de Baudó y el Océano Pacífico, y al sur por el Cinturón Deformado de Istmina.

La secuencia sedimentaria prospectiva para hidrocarburos data del Paleógeno y se acumuló sobre un basamento cretácico, compuesto por rocas básicas oceánicas y sedimentitas (calizas, lutitas oscuras y cherts) aguas de plataforma distal y de talud (Figura 3). Se postula que el terreno oceánico que forma el basamento migró desde finales del Cretácico y colisionó, adosándose al borde continental del NW de Suramérica hasta cerrar la comunicación entre el Océano Pacífico y el Mar Caribe. Durante el Cenozoico, el Cinturón Deformado de Istmina se comportó como una plataforma somera, que acumuló sedimentitas ricas en materia orgánica, cherts y calizas al parecer arrecifales.

La Subcuenca Atrato presenta un estilo estructural de arco frontal (Forearc). Estructuralmente la Subcuenca Atrato está delimitada al Occidente por la presencia de fallas de crecimiento? que ponen en contacto el “Complejo de Baudó” con diferentes unidades sedimentarias. Al Este está limitada por un sistema de fallas rectilíneas con orientación preferencial N-S, que pone en contacto parte de la secuencia sedimentaria con unidades ígneas del Arco Magmático de Mandé. Al Sur con el Alto Estructural de Istmina–Condoto y hacia el Norte la subcuenca se continúa en Panamá con el nombre de Cuenca Chucunaque-Tuira.


GEOLOGÍA DEL PETRÓLEO

Evidencia de Hidrocarburos
En la Subcuenca del Atrato se han perforado cinco pozos exploratorios: Buchadó-1, Pacurta-1, Nécora-1, Opogadó-1 y Urodó-1; en el pozo Buchadó-1, se encontraron manifestaciones de aceite y gas. Así mismo, en superficie se encuentran numerosos rezumaderos de aceite y gas, que atestiguan la existencia de un sistema petrolero activo.

Dado que el grado de conocimiento en la Subcuenca Atrato es en muchos aspectos insuficiente, los nuevos datos derivados la aerogeofísica sugieren una alta probabilidad de que existan extensas zonas de cocina para la materia orgánica en aquellos sectores (alargados en la dirección norte-sur), donde las rocas generadoras han alcanzado profundidades superiores a 5000 m.

Roca Generadora
Aunque no se tienen resultados concluyentes, se considera que las formaciones Clavo y Salaquí son los equivalentes laterales de la Formación Iró de la Subcuenca de San Juan. De ser así, y dadas las evidentes similitudes litofaciales observables, es de esperar que las formaciones Clavo y Salaquí tengan un potencial generador parecido al de la Formación Iró. La Formación Salaquí, que es la más parecida a Iró, se describe como una secuencia compuesta por calizas silíceas, gris claras a marrón claro, intercaladas con capas delgadas e irregulares de chert negro y con margas en los intervalos menos silíceos (Figura 4).

Migración
La presencia de rocas generadoras en las subcuencas San Juan y Atrato está documentada con base en la caracterización geoquímica de la Formación Iró, en el sector del alto Istmina-Condoto. Del modelamiento de generación de hidrocarburos (1D, pseudo-pozo) basados en esta formación y cronoestratigráficamente correlacionable con las formaciones Salaquí y Clavo, se infiere que estas alcanzaron importantes procesos de generación y expulsión de hidrocarburos durante el Mioceno tardío-Plioceno (Figura 5).

La ocurrencia de estructuración pre-Mioceno tardío y la posibilidad de trampas estratigráficas en la Subcuenca Atrato, genera un escenario de bajo riesgo por sincronismo para posibles acumulaciones económicas de hidrocarburos en unidades del pre-Mioceno tardío, y aún más jóvenes.

Roca Reservorio
Las unidades con mayor posibilidad de contener reservorios en la Subcuenca Atrato son las formaciones Uva, Napipí y Sierra, que incluyen importantes intervalos arenoso-conglomeráticos, en especial en el costado oriental. Al parecer, en el lado occidental, la secuencia cenozoica contiene un mayor volumen de rocas marinas (calizas, cherts y lodolitas oscuras), lo cual significa la existencia de potenciales trampas en zonas fracturadas y una mayor capacidad de generación de hidrocarburos.

Roca Sello
Los principales sellos corresponden a niveles lutíticos en las formaciones Napapí, Sierra y Munguidó. Por ejemplo, hacia el tope de la Formación Sierra ocurren arcillolitas limosas y limolitas arcillosas, calcáreas y carbonosas, que bien pueden representar buenas rocas sello. Así mismo, en la Formación Napipí se encuentran arcillolitas calcáreas grises, a veces carbonosas, que también pueden llegar a ser barreras para la migración.

Trampas
En la Subcuenca Atrato son de esperar los siguientes tipos de entrampamientos:

  1. Trampas estratigráficas dentro de la Formación Salaquí y la Formación Uva, al acuñarse contra ambos flancos de la cubeta de sedimentación.
  2. Trampas estructurales, tales como anticlinales asociados con fallamiento inverso al occidente del Río Atrato, en el sector occidental de la Cuenca.
  3. Trampas estructurales, asociadas con posibles diapiros de lodo, sobre todo en el centro y flanco occidental de la subcuenca.

PROSPECTIVIDAD

Con base en el modelo geológico y geoquímico obtenido y de acuerdo con los resultados del balance de masas calculado, en la Subcuenca Atrato existen expectativas de recursos por descubrir del orden de 850 MBPE


SÍSMICA REPRESENTATIVA

En esta cuenca, los programas sísmicos más representativos son: L-1972, SJ-1981, QA-82, ANH-CHBN-2005 (Figura 6).


GEOQUÍMICA

En el pozo Buchadó-1 se registra una evaluación de madurez en el intervalo de 6090 a 15539 pies. En este nivel la roca muestra una madurez baja, confirmada por bajos valores de Tmáx., con rango entre 417 °C a 435 °C, y valores de reflectancia de vitrinita de 0,34 a una profundidad de 6090 pies. Los valores de vitrinita alcanzan hasta 0,46 en las profundidades entre 15 300 y 15 400 pies.

La sección Eoceno-Mioceno se encuentra desde inmadura hasta la ventana de generación de aceite con valores en el índice de coloración de esporas entre 3,0 y 5,5; valores de reflectancia de vitrinita (Ro) entre 0,23 y 0,61; además de valores de Tmáx. en pirólisis en el rango de 417 °C y 439 °C que reflejan la baja madurez de las posibles rocas generadoras de la Subcuenca Atrato.

En general se reporta baja madurez térmica en las rocas estudiadas, pero es importante subrayar que la Subcuenca Atrato tiene un nivel de estudio en el tema geoquímico muy pobre y hay una probabilidad alta de que existan zonas de generación en sitios donde las rocas generadoras hipotéticas de la Subcuenca Atrato hayan alcanzado mayores profundidades.


NOTA

La ANH tiene proyectada la perforación de un pozo estratigráfico convencional a más de 10.000 pies en el sector del Bajo Atrato, con recuperación de núcleos y toma de registros de pozo.